Roman Mlodkowski es director general de BIZNES24, un canal privado de noticias del mundo empresarial con sede en Polonia, y antiguo alumno del IESE.
Cualquiera podría pensar que crear un canal de televisión nacional desde cero exige una importante inversión y contratación de personal. No es el caso de BIZNES24. Este canal, el único de negocios de Polonia con emisión las 24 horas, es un buen ejemplo de innovación, improvisación y control de costes. Según afirma su fundador y director general, Roman Mlodkowski, “puedes crear una televisión profesional con muy poco. Implica mucho trabajo, pero es posible”.
Mlodkowski comenzó su carrera como periodista en Polonia en los años noventa, después de que el sindicato Solidaridad consiguiera derrocar los gobiernos comunistas en el centro y este de Europa en un proceso que tendría su culmen en la caída del Muro de Berlín en 1989. Así lo recuerda: “Había nacido un nuevo mundo y lo sentíamos así, no porque fuéramos jóvenes, sino porque todo había cambiado de manera radical: habíamos pasado de la opresión a la libertad. Era un momento emocionante e interesante para ejercer el periodismo”.
A diferencia de sus colegas, que se centraron en las noticias políticas, Mlodkowski se especializó en el periodismo de negocios. “Desde un punto de vista estratégico, es bueno diferenciarse”, asegura. “Para mí, el sector empresarial y económico ofrece más respuestas que la política. El periodismo de negocios se basa en cifras reales, por lo que siempre puedes relatar toda la historia con detalles”, dice.
Historias que deben ser contadas
Tras muchos años como presentador, productor y director de radio y televisión, Mlodkowski echaba en falta más espacio en la televisión polaca sobre las incontables e interesantes historias de las empresas que estaban creciendo y cambiado la forma de hacer las cosas. Así pues, decidió fundar su propio canal de noticias de negocios. “Siempre estoy iniciando proyectos, lo cual es un privilegio y también una maldición”, comenta con sorna.
BIZNES24 comenzó su andadura el 2 de enero de 2020 en el mismo edificio en el que lo había hecho en su momento el primer canal de televisión independiente polaco, Polsat. Este abandonaría esas instalaciones el 2 de marzo y, en solo 18 días, Mlodkowski y su equipo transformaron el estudio en el suyo propio. La primera emisión tuvo lugar el viernes 20 de marzo de 2020, una fecha fatídica, ya que marcó también el inicio de los confinamientos por la pandemia de COVID-19 en el país y en gran parte del mundo.
Un gran porcentaje de los ingresos de BIZNES24 provenían de realizar proyectos especiales, algo que en aquel momento era imposible, ya que no podían encontrarse con nadie en persona. Con el tiempo, los confinamientos se fueron relajando. Sin embargo, cuando ya estaban cerca de la recuperación y comenzaban a prosperar, estalló la guerra en Ucrania, un conflicto que, de nuevo, restringió su capacidad para llevar a cabo los proyectos que tenían planeados.
El secreto de su supervivencia, la innovación
BIZNES24 ha resistido ambas crisis. El secreto de su supervivencia, afirma Mlodkowski, es la innovación, sobre todo en la estructura de costes. En lugar de gastar millones en tecnología y equipos punteros, compraron un PC –uno potente, pero PC al fin y al cabo– y un software por unos 450 dólares. Este equipamiento, asegura, puede conseguir lo mismo que una sala de control de un millón de dólares.
También ahorraron adquiriendo equipos que Polsat ya no iba a utilizar en sus nuevas instalaciones, como tres cámaras para el estudio por una fracción de su precio real. Además, han mantenido a raya los costes de la plantilla empleando a un solo operador en la sala de control en lugar de los tres que suelen ser habituales y, cuando uno de los presentadores descansa, Mlodkowski le releva frente a las cámaras.
Marcar la diferencia
Mlodkowski atribuye la creación y el éxito de BIZNES24 a la extraordinaria motivación de su equipo, un reducido pero muy entregado grupo de personas, y cree firmemente en la llamada “triple motivación”, es decir, la extrínseca (el salario), la intrínseca (el reto profesional) y, por encima de todo, la trascendente, el convencimiento de que lo que haces beneficia a la sociedad. En un mundo en el que aumentan los bulos, él y su equipo están convencidos de la importancia de mantener bien informado al público sobre los asuntos económicos y financieros. “Disfrutamos de este proyecto profesional que estamos construyendo, así como de la sensación de estar marcando la diferencia. Es un auténtico privilegio trabajar con estas personas”, asegura.
“Disfrutamos de este proyecto profesional que estamos construyendo, así como de la sensación de estar marcando la diferencia. Es un auténtico privilegio trabajar con estas personas”.
Una de las cosas que Mlodkowski aprendió durante el Advanced Management Program (AMP) en el IESE es la necesidad de una estructura. El sector de los medios de comunicación exige prestar atención al detalle y a aquellos asuntos que pueden pasar desapercibidos fácilmente, sobre todo si emites 24 horas al día. Resulta fundamental levantar estructuras de gestión claras desde el principio.
Convertirse en una fuente fiable
BIZNES24 se transmite a través de los principales distribuidores de Polonia y cuenta con su propio canal online. Según Nielsen, BIZNES24 supera los dos millones de espectadores al mes, o casi 100.000 espectadores únicos al día, y ofrece una programación destinada a un público nicho, pero acomodado. “Nuestros programas son muy aburridos. Te tiene que interesar mucho el mundo de los negocios para querer vernos”, bromea Mlodkowski.
Pese a ser una empresa pequeña y de bajo coste, compensan con creces su discreta iluminación y material visual con invitados de calidad y una sólida independencia editorial. “Uno de los motivos por los que logramos sobrevivir en este mercado es que somos una fuente fiable”, afirma Mlodkowski. Y añade: “Nunca vendemos las noticias, del mismo modo que no puedes comprar una entrevista. Somos muy estrictos a la hora de asegurarnos de que el espectador puede distinguir qué contenido es un editorial independiente y qué otro promocional o comercial”.
La televisión copa todos los aspectos de la vida de Mlodkowski. Admite que, en ocasiones, las interminables jornadas le dificultan conciliar el trabajo con la vida familiar, pero no lo cambiaría por ningún otro: “Tengo mucha suerte de dedicarme a algo creativo. Igual que un pintor o un escultor no va a trabajar, sino que pinta o esculpe, yo tampoco trabajo, yo hago televisión. Me apasiona mi profesión”.