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¿Cambio de sector en mitad de una carrera profesional? Sí, es posible

Llevas tiempo sintiéndote estancado, que has llegado al techo profesional al que podías aspirar. Quieres dar un paso hacia otra dirección, asumir nuevos retos, pero te preguntas si tras 15 o 20 años de vida profesional, es demasiado tarde para reinventarse. Cambiar de sector en este momento suena intimidante, pero nada más lejos de la realidad. Sigue leyendo nuestros consejos para iniciar de nuevo una gran aventura profesional.

Cambio de carrera. De crisis a oportunidad

Cambiar de carrera en la edad adulta puede parecer un salto al vacío. No en vano, llevas media vida tomando decisiones hacia una determinada dirección. Sin embargo, no eres el mismo que cuando tenías 18 años y empezabas a construir tu vida profesional. Así que, no te preocupes, sentir que necesitas un cambio, no es tan raro como parece y no te olvides que sea cual sea el camino que quieres iniciar, la experiencia es tu aliada: lo que has hecho y has construido no te lo quita nadie.

Reflexiona

Primero de todo tienes que determinar qué tipo de reinvención quieres alcanzar.

Quizás quieres aprovechar toda esa experiencia acumulada para convertirla en algo nuevo y rentabilizarla, manteniendo y potenciando la parte que más te gustaba de tu antigua carrera. O quizás buscas algo más disruptivo, una nueva profesión, que tal vez responda a una vocación frustrada o se cimente en alguna habilidad especial cultivada a lo largo de años. En cualquier caso, nadie inicia un proceso de reinvención profesional para hacer un trabajo que no le gusta. Este proceso implica sí o sí un convencimiento de que será para mejor.

Analízate y analiza el mercado

Analiza tus puntos fuertes y tus puntos débiles como profesional. Si piensas en el trabajo que hacías hasta ahora, podrás decir el tipo de tareas que se te daban mejor, las que se te daban peor, y también, las que te gustaban más y menos. Analiza también tu perfil: aptitudes, competencias, personalidad, valores e intereses. Pon en valor tu experiencia y conocimientos.

Cuando ya tengas definido tu perfil y el tipo de trabajo que deseas realizar, comienza a investigar dónde puedes desempeñar ese papel. Así equilibrarás tus aspiraciones con la demanda del mercado, sabiendo que hoy muchos sectores se enriquecen con “personal externo”, con el que consiguen equipos más heterogéneos, obteniendo así resultados más innovadores. Habilidades fundamentales como la capacidad de influir, comunicar y resolver problemas son transferibles a cualquier industria.

Trabaja en tu marca personal y busca ayuda

Cuidar tu marca personal. Qué te hace diferente y cómo lo muestras al mundo, debe ser, sin duda, lo primero en lo que debes trabajar. Y, además, no te engañes: lleva tiempo, estrategia y dedicación. Redes profesionales como LinkedIn son un gran escaparate para darte a conocer, pero debes siempre apostar por contenidos que aporten valor y diferencia. Además, plantéate contratar los servicios de un coach que te proporcione consejo y objetividad, te ayude a desarrollar tus grandes virtudes y a minimizar aquellos aspectos en los que estás más flojo.

Conoce todas las ventajas del coaching ejecutivo.

Amplía tu red de contactos y empieza a venderte

Es muy importante que también definas quiénes van a acompañarte y facilitar esta transformación laboral que ansías. Aprovecha en primer lugar, todas esas relaciones que has entablado en tus años laborales y piensa cómo te pueden ayudar a conseguir tu nuevo objetivo. Pero sobre todo planifica cómo vas a relacionarte con esas nuevas personas y empresas del sector al que quieres acceder: apúntate a eventos, invita a contactos en LinkedIn, interactúa con ellos… El networking y la red de contactos, tanto personal como virtual son imprescindibles para acercarte cada vez más al sector en el que te quieres mover. Lee aquí 5 consejos para hacer networking en tiempos de crisis.

Aprende lo que necesitas

Sí. Quizás necesitas volver a las aulas. No existen procesos de reinvención profesional sin una fuerte inversión en formación.

Tanto si reaprovechas todo tu bagaje como si te lanzas de cero a una nueva profesión, necesitarás una puesta al día en tus conocimientos. ¿Y qué estudiar? Puedes optar por cursar programas de dirección general como el PDD o el PDG, que te ayuden a desarrollar tu visión de negocio y tus competencias directivas. Quizás necesites adquirir nuevos conocimientos tecnológicos o si te planteas emprender, tendrás que trabajar además muchas de las conocidas como habilidades blandas (comunicación, liderazgo, persuasión, resolución de problemas…).

En IESE existe un amplio abanico de programas para desarrollarte como directivo o emprendedor que te ayudarán a alcanzar cualquier cambio de rumbo que te propongas.

El triple salto en tu carrera: cuando un cambio de trabajo significa cambiarlo todo.

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