Noticias
En busca de la fórmula del nuevo crecimiento global
El Consejo Asesor Internacional del IESE aboga por “paridad, reformas y visión a largo plazo”
Patricia Francis, responsable de Transformación del Sector Público en el Gobierno de Jamaica: “La igualdad de oportunidades supondría globalmente un beneficio de 28 billones de dólares” / Foto: Jordi Estruch
15 de abril de 2016
El FMI ha ajustado recientemente las proyecciones de crecimiento global del 3,6 al 3,2 por ciento. Aunque las cifras son mejores que las del 2015, las perspectivas a largo plazo están amenazadas por el actual entorno económico.
Según el director general del IESE, Jordi Canals, la respuesta a esta “nueva normalidad” está supeditada a la adopción de un “objetivo a largo plazo” que fomente el crecimiento. Así lo aseguró durante la inauguración de la reunión anual del Consejo Asesor Internacional del IESE (IAB por sus siglas en inglés) en el campus de Barcelona. Lo acompañaban otros miembros del Consejo, expertos procedentes de la administración pública, la banca y los negocios, que compartieron su perspectiva sobre el panorama económico global.
Aprovechar la igualdad de oportunidades
La exresponsable de Transformación del Sector Público en el Gobierno de Jamaica, Patricia Francis, destacó que la igualdad de oportunidades supondría globalmente un beneficio de 28 billones de dólares. Francis, nombrada recientemente coordinadora interina del Alto Panel de las Naciones Unidas sobre el Empoderamiento Económico de las Mujeres, aseguró que la inclusión financiera y digital de las mujeres podría suponer “un nuevo impulso para mantener los objetivos de sostenibilidad”.
“Entre 1990 y 2010 la pobreza se redujo un 28 por ciento gracias a una mayor igualdad. Necesitamos abordar desafíos como la economía asistencial, las diferencias salariales o la exclusión económica para aprovechar los 28 billones de dólares que las mujeres representan en la economía global. La paridad es responsabilidad de todos”.
El presidente de Kerry Logistics y exministro de Asuntos Exteriores de Singapur, George Yeo, citó el ejemplo de Bangladesh, donde “la vitalidad orgánica, impulsada en gran parte por mujeres, está provocando que la economía evolucione mejor que en la India”.
Yeo cree que esta transformación podría extenderse a los países en vías de desarrollo, gracias, en parte, a otro protagonista: la digitalización.
Digitalización frente a desigualdad
“El acceso a internet está impulsando una enorme transformación a nivel atómico. Dale un smartphone a una mujer oprimida, un niño o un ciudadano indio de una casta inferior y el mundo se abrirá antes sus ojos”.
La digitalización debe aprovecharse para contribuir a las comunidades globales con menos recursos pero debe ir contra lo que Yeo describe como “desajustes” en el poder y oposición política al cambio”.
“La transformación implica sufrimiento. Los gobiernos, con sus ciclos de vida de cuatro o cinco años, son contrarios a reformas estructurales que puedan provocar este sufrimiento. Pero los resultados –tipos de interés negativos, “dinero gratis” – no promueven la equidad. Al contrario, provocan desigualdad e implican problemas para el futuro”.
“Necesitamos abordar desafíos como la economía asistencial, las diferencias salariales o la exclusión económica para aprovechar los 28 billones de dólares que las mujeres representan en la economía global. La paridad es responsabilidad de todos”.Patricia Francis, exresponsable de Transformación del Sector Público en el Gobierno de Jamaica
Un cambio de época exige una perspectiva a largo plazo
Michel Camdessus, gobernador honorario del Banco de Francia y exdirector general del FMI, también analizó las perspectivas a largo plazo para la economía global. Para Camdessus, las previsiones del FMI no son “preocupantes”. Pero el riesgo de caídas y “una visión miope de la economía están creando no solo una nueva normalidad, sino una nueva mediocridad”.
“Hemos proyectado un crecimiento para el 2050 del 3,3 por ciento, pudiendo alcanzarse un 4 ó 5 por ciento en África”, aseguró Camdessus. Sin embargo, otras prioridades a corto plazo, un fracaso a la hora de conseguir el reequilibrio chino, o riesgos emergentes ajenos a la economía, podrían acabar en cualquier momento con ese crecimiento. Estas posibles situaciones deben abordarse con una respuesta “multilateral” que exigirá un “enorme esfuerzo”.
“Estamos ante un cambio de época. Y eso exige mirar al futuro, lo cual implica reformar, luchar contra la desigualdad y generar oportunidades para las mujeres. Los mercados lo saben y por eso presenciamos volatilidad. No debemos permitir que esto se convierta en una profecía autocumplida”.
Generar crecimiento en mercados emergentes
Un segundo panel de miembros del consejo procedentes del mundo de los negocios coincidió en la importancia de adoptar una visión a largo plazo.
Las claves para impulsar el crecimiento en los mercados emergentes son contar con una estrategia a largo plazo y ser flexibles, aseguró Ibukun Awosika, presidenta del First Bank of Nigeria. Eso, y “una mayor necesidad de estar más cerca del mercado local. Es esencial colaborar con compañías locales que compartan tus valores, sin importar el tamaño o el alcance. Quieres asociar tu marca a otras que reflejen tu cultura corporativa”.
Una opinión que comparte Andrea Christenson, consejera de Cementos Molins: “Miramos hacia los mercados emergentes cuando buscamos personas para la cadena de suministro, pero trabajar con socios locales es esencial en el mundo de la empresa”.
Ermenegildo Zegna, CEO de Zegna Italia, destacó la necesidad de ser capaces de cambiar de rumbo en una economía global que ya se está transformando. “Hemos tenido que repensar nuestro modelo de negocio. La digitalización está comportando numerosos cambios: el 80 por ciento de nuestras ventas en China son a través del móvil”.
“La clave es ser flexible y estar convencido de que, en los momentos duros, las buenas empresas salen fortalecidas”, aseguró Zegna.
“Si quieres obtener altos beneficios debes hacer frente a una elevada volatilidad, así como a retos políticos y digitales cíclicos”, afirmó Francesco Vanni d’Archirafi, CEO de Citi Holdings. “Esto requiere una perspectiva a largo plazo. Y este tipo de perspectiva puede dar mejores resultados en mercados emergentes que en aquellos desarrollados”.
Hans Ulricht Maerki, antiguo CEO de IBM y miembro del consejo de Swiss Re, reclamó un optimismo renovado. “Los mercados emergentes son mercados de crecimiento rápido. Un crecimiento global del 3,2 por ciento, que alcanza un 6 por ciento en China, supone una excelente oportunidad”.
Vanni instó a los MBA presentes a aprovechar las oportunidades: “Utilizad cada recurso que tengáis disponible, desde estudiar en una escuela como el IESE, hasta ser flexibles. Y mantened vuestra visión a largo plazo”.