IESE Insight
El trabajo a tiempo parcial beneficia tanto a la empresa como al empleado
El trabajo a media jornada aumenta la productividad un 2% y reduce los días de baja por enfermedad. Descubre otros beneficios de este modo de contrato.
En un contexto de mayor concienciación sobre la necesidad de equilibrar trabajo y vida personal, junto con las nuevas modalidades laborales y el estancamiento de la productividad en la eurozona, la relación entre trabajo a tiempo parcial y la productividad empresarial ha ganado gran relevancia en todos los sectores.
Mi reciente investigación revela que, al contrario de lo que podría pensarse, en general, la productividad es mayor cuando la empresa cuenta con un mayor número de trabajadores a tiempo parcial. Y no solo eso: el número de bajas laborales por enfermedad tiende a ser menor.
Ambas conclusiones se basan en el estudio de los datos de más de 800.000 empleados de unas 7.500 empresas del sector privado en Bélgica (entre 2016 y 2021) y en datos financieros del Registro Mercantil de Bélgica.
Así, un incremento de 10 puntos porcentuales de trabajadores a tiempo parcial, por ejemplo del 20% al 30%, genera de promedio un aumento del 2% de la productividad (porcentaje medido como valor agregado bruto a nivel de la empresa por hora trabajada). Se trata de una cifra considerable, sobre todo si tenemos en cuenta que el crecimiento medio anual de la productividad en la Unión Europea durante el período 2010-2021 fue de tan solo el 0,9%.
De todos modos, el impacto es más positivo en aquellas empresas en las que menos del 30% de la plantilla está contratada a tiempo parcial; cuando se supera este porcentaje, el efecto disminuye.
La edad de los empleados a tiempo parcial no parece influir en su productividad, mientras que sí lo hace el número de años de experiencia en la organización. Es decir, el efecto es más significativo cuando los trabajadores a tiempo parcial tienen más antigüedad.
Diversos sectores experimentan diferentes aumentos de productividad. Según el estudio, los más beneficiados son el inmobiliario, la construcción, la hostelería, las TIC y aquellos que prestan servicios científicos, técnicos y de elevada cualificación. También se observa que el trabajo a tiempo parcial es más frecuente en las empresas de más de 500 empleados (donde representa cerca del 30%), en comparación con las de menos de 10 empleados (donde no supera el 20%).
De acuerdo con los datos de 2022 de la OECD, en España, el 13% de los empleados trabajan a tiempo parcial. Se trata de un porcentaje cercano al promedio de los 27 países de la UE, situado en el 14,8%, que, además, apenas ha variado en la última década: en 2010 era del 12,2%. Más diferencias se observan si atendemos al género. Según la OCDE, en su conjunto, la diferencia de género en cuanto al porcentaje de trabajadores a tiempo parcial (% de mujeres vs. % de hombres) fue de 15 puntos porcentuales en 2022: el 24,7% de mujeres trabajaron a tiempo parcial frente al 9,8% de hombres. En Estados Unidos, esta modalidad es menos habitual tanto en mujeres como en hombres (16% en ellas frente al 8% en ellos).
Por su parte, en los países nórdicos la diferencia entre mujeres y hombres (en Finlandia y Dinamarca es de 8 puntos porcentuales, del 21% al 13%) es menor que en países como Austria (36% vs. 9%), Australia (37% vs. 15%), Alemania (36% vs. 10%) o Reino Unido (35% vs. 11%). En general, la diferencia de género ha permanecido sorprendentemente estable en la última década. La equidad se acusa más en los países nórdicos, Reino Unido y Alemania, aunque las diferencias de género siguen siendo altas en estos dos últimos.
Si bien los empleadores suelen mostrarse escépticos sobre el trabajo a tiempo parcial, la investigación sugiere que podrían obtener unos beneficios de la productividad aún inexplotados si ofrecieran a los empleados la posibilidad de ajustar el número de horas de trabajo según sus necesidades.
Sobre la investigación
El estudio se basó en los datos salariales de más de 800.000 empleados belgas proporcionados por SD Worx, uno de los principales proveedores europeos de soluciones de Recursos Humanos, y en los datos financieros del Registro Mercantil Belga.
Se eligió a Bélgica como referencia al ser uno de los países de la UE con un mayor número de trabajadores a tiempo parcial. Se define como trabajo a tiempo parcial aquel que implica trabajar un mínimo de 12 horas y no más de 38-40 horas por semana, generalmente considerado como una jornada a tiempo completo. De la muestra, muchos empleados trabajaban de 20 horas/semana (la mitad de una jornada completa) a 30-32 h/semana (el 80%); la media se situó en torno al 60% de las horas de trabajo a tiempo completo.