IESE Insight
La recuperación pasa por la reconstrucción de la confianza
Tras la intensa recesión económica de 2008-2009, el elemento crucial sin el cual no podremos dejar atrás la crisis es la reconstrucción de la confianza.
Aunque observa síntomas de recuperación tras la intensa recesión económica de 2008-2009, el informe de 2010 del Grupo Asesor Económico Europeo (EEAG, en sus siglas en inglés) advierte de que aún no hemos salido del túnel. Varios factores pueden retrasar la recuperación y, en este sentido, el informe destaca una serie de retos importantes que aún tendremos que superar.
Los autores, entre ellos el profesor del IESE Xavier Vives, advierten de que el proceso de reestructuración del sistema bancario dista mucho de haberse completado. Esta situación puede conllevar una restricción del crédito y de la extensión de los préstamos. Otros obstáculos que pueden darse son un estancamiento de la inversión de capital y un empeoramiento del mercado laboral, ya de por sí tenso, lo que podría derivar en una disminución del consumo.
Pero no todo está perdido. Los autores prevén que las economías emergentes disfruten de condiciones económicas más favorables, hasta el punto de convertirse en los motores de crecimiento de la economía mundial. Y el PIB mundial, aunque seguirá estando por debajo de un nivel óptimo, aumentará un 2,3% en 2010, aseguran.
Condiciones macroeconómicas
Según el informe, la recesión ha finalizado oficialmente en Estados Unidos. La mayor contribución negativa al crecimiento en 2009 se produjo en el apartado de la inversión, y se dio además una fuerte caída de la demanda de bienes extranjeros. Sin embargo, la caída de las exportaciones fue menor, lo que permitió una mejora considerable de la balanza comercial. Además, a mediados de 2009, los precios de la vivienda dejaron de caer drásticamente. Los autores atribuyen esta mejora a los enormes subsidios y ayudas fiscales concedidos por el gobierno estadounidense.
En Europa, todos los países miembros de la UE, con la excepción de Polonia, sufrieron los efectos de una profunda recesión. La recuperación comenzó en la segunda mitad de 2009 en toda la UE menos en Chipre, Grecia, España y el Reino Unido, que seguían en recesión en el tercer trimestre de 2009. Aunque las perspectivas empresariales han mejorado, continúan los problemas en el sector bancario, lo que podría dificultar la recuperación de la inversión.
Japón, la economía del mundo más afectada por la recesión, empezó su recuperación en el segundo trimestre de 2009, gracias sobre todo al comercio exterior y el consumo, los indicadores económicos más importantes. Aun así, la tasa de crecimiento anual en 2009 siguió cayendo, y las perspectivas a largo plazo son sombrías.
Mientras, en China, las cosas van mejor. El gigante asiático ha vuelto a situarse en los niveles de crecimiento anteriores a la crisis, y las perspectivas económicas a corto plazo siguen siendo positivas.
Reconstruir la confianza
Aunque algunas políticas han logrado impedir otra Gran Depresión, la recuperación todavía es frágil. Según los autores, una de las razones es la pérdida de la confianza en los intermediarios financieros, bancos y mercados financieros. El informe enumera los efectos adversos de la crisis en la confianza en los mercados financieros, y analiza si la actividad del sector financiero podrá volver a los niveles anteriores a la crisis.
La pérdida de la confianza, causada en gran medida por el comportamiento oportunista del sector financiero, seguramente ocasione una caída de la inversión en valores arriesgados y de la demanda de productos financieros complejos con una rentabilidad ambigua, así como una menor diversificación de las carteras y una menor confianza en los intermediarios. En el capítulo dedicado a la reconstrucción de la confianza, los autores destacan dos situaciones: una mayor regulación y la reacción del sector.
Los autores sostienen que la regulación financiera podría afectar a la percepción de la solvencia de los intermediarios, pero lo más seguro es que apenas tenga impacto en la confianza. Según el informe, las medidas más importantes para recuperar la confianza son la creación por parte de la Administración de Obama de una agencia de protección del consumidor y de una agencia de prevención del fraude financiero.
La estrategia alternativa consiste en que los propios intermediarios reconstruyan su reputación. Para ello, los autores sugieren las siguientes medidas:
- Implantar un sistema de calificación para los intermediarios. Un sistema de calificación fácilmente comprensible, de 0 a 10, valoraría a los intermediarios en función de su capacidad para ofrecer servicios fiables, lo que reduciría los comportamientos oportunistas y daría a los intermediarios incentivos para aumentar su fiabilidad.
- Crear un sistema de retribuciones basado en la confianza. Ofrecer incentivos que retribuyan el buen hacer de los gestores de inversiones fomentaría un comportamiento fiable y aumentaría la confianza del inversor y su disposición a invertir.
- Promover la educación financiera. Tomar medidas para educar a los inversores, ya sea mediante la introducción de una asignatura financiera en las escuelas públicas o materiales educativos de terceras partes, ayudaría a evitar que los inversores cayeran víctimas de abusos financieros.
El informe de 2010 también incluye un capítulo dedicado a examinar los grandes déficit de los países desarrollados más importantes, así como un análisis del impacto de la crisis en la economía estadounidense y otro en la zona euro, poniendo como ejemplo el caso de Grecia.